Cristina Garmendia: "Las políticas de diversidad son fundamentales, ya que aportan riqueza de perspectivas y experiencias para resolución de problemas complejos"
La presidenta de la Fundación Cotec para la Innovación ha charlado con el director de Comunicación de la Cámara Alemana, Martin Schneider, en el último número de la revista 'Economía Hispano-Alemana'.

Desde su creación, en 1990, la Fundación Cotec ha desempeñado un papel clave en el impulso de la innovación como motor de desarrollo económico y social en España. Esta organización privada y sin ánimo de lucro, respaldada por más de 100 miembros, entre empresas y administraciones públicas, se ha ido consolidando como un observatorio estratégico de la I+D+i en el país, una fuente de conocimiento y un laboratorio de ideas. Cotec lleva más de tres decenios proporcionando análisis y consejos en innovación, tecnología, educación o economía, gracias a una visión inclusiva del concepto de innovación, que define como “todo cambio (no solo tecnológico), basado en conocimiento (no solo científico), que genera valor (no solo económico)”.
Martin Schneider, director de Comunicación de la Cámara Alemana, ha charlado para la revista 'Economía Hispano-Alemana' con su presidenta, Cristina Garmendia, en una entrevista en la que han hablado sobre talento, formación e innovación y que reproducimos en parte a continuación:
Con el despliegue masivo de la Inteligencia Artificial Generativa y la automatización en general en nuestras empresas, estamos presenciando una disrupción tecnológica de gran magnitud, capaz de generar brechas económicas y sociales. ¿Qué herramientas específicas promueve la Fundación Cotec para acompañar a la sociedad en esta transformación?
Una de nuestras iniciativas destacadas en ese sentido es #MiEmpleoMiFuturo, una campaña que lanzamos en 2019 y vamos a recuperar en 2025, con idea de concienciar sobre los cambios que está provocando la automatización en el mercado laboral y la necesidad de acompañar con políticas públicas la llegada de la cuarta revolución industrial. En su día recogimos 135.000 firmas, que llevé personalmente al Congreso de los Diputados, reclamando a todos los partidos políticos iniciativas que protejan al empleo del impacto de la revolución tecnológica. La realidad ha dejado cortas las predicciones que hicimos entonces.
Tenemos una amplia variedad de informes que actualizamos periódicamente para monitorizar los distintos ritmos del cambio tecnológico en los territorios de España. Así vamos viendo cómo van impactando en la población las tres grandes transformaciones de la economía: de lo analógico a lo digital, de lo lineal a lo circular y de lo tangible a lo intangible. Por poner unos ejemplos, el Mapa Tecnológico de España, que analiza la evolución de las 13 ramas de
actividad más intensivas en tecnología; nuestro Observatorio de Empresas Gacela, que detecta las empresas de alto crecimiento; o nuestro Monitor NextGen, que analiza minuciosamente la adjudicación y ejecución de los fondos NextGeneration, que para España han supuesto una enorme oportunidad para transformar la estructura económica del país. Estos y otros informes ayudan a monitorizar las grandes transformaciones que vivimos. Son herramientas de diagnóstico que resultan de gran utilidad para las administraciones públicas para diseñar políticas que protejan a los ciudadanos ante el cambio.
Dado que esta transformación requiere la participación conjunta de diversos actores, ¿cómo se puede fomentar una colaboración efectiva entre empresas, administraciones públicas y sociedad civil para anticipar y gestionar estos retos?
La colaboración efectiva entre empresas, administraciones y la población es esencial para abordar los retos de la transformación tecnológica. Debe basarse en la creación de espacios de diálogo para que los diferentes actores puedan compartir conocimientos y diseñar estrategias conjuntas. La colaboración público-privada es un tema que nos preocupa mucho en Cotec porque, concretamente, en España es un reto histórico y pensamos que necesita un gran impulso.
Todo el año generamos eventos de diferente tipo, grupos de trabajo, proyectos bilaterales, e iniciativas de todo tipo que tratan de incentivar estas alianzas. Las administraciones públicas deben liderar la creación de marcos regulatorios que faciliten la innovación, mientras que las empresas pueden con tribuir con su capacidad tecnológica y experiencia en implementación. Por su parte, la sociedad civil debe ser escuchada para garantizar que los beneficios de esta transformación sean accesibles para todos.
Además, se debe fomentar la cocreación de proyectos específicos que permitan experimentar nuevas formas de colaboración, así como garantizar el seguimiento y la evaluación de su impacto. Por último, me gustaría añadir que la educación y la formación son herramientas clave para conectar las necesidades del mercado laboral con las capacidades de la sociedad, así como para propiciar una transición justa y equitativa hacia el nuevo paradigma tecnológico.
Cotec ha publicado informes sobre el futuro del empleo ¿cuáles son los principales impactos que la automatización, la digitalización y el uso de la inteligencia artificial están generando en el mercado laboral y qué perspectivas se abren para los trabajadores?
Los procesos de digitalización, automatización e inteligencia artificial están transformando profundamente el mercado laboral. En Cotec cada año recogemos en una macroencuesta la percepción de la población española respecto al fenómeno de la innovación y observamos una evaluación muy positiva, pero con una preocupación muy marcada sobre su impacto. El 52% de los ciudadanos considera que el cambio tecnológico conduce a una mayor desigualdad, frente al 28% que opina lo contrario. Esto es una percepción que debemos contrastar con la realidad. En Cotec creemos firmemente que la innovación es una herramienta clave para impulsar la generación de empleo y riqueza, así como para reducir desigualdades. Sin embargo, también puede provocar brechas, cuando su implementación no se realiza de manera inclusiva.
Hasta ahora, en las economías más avanzadas, la llegada de robots y algoritmos no ha perjudicado significativamente la creación de empleo. El verdadero desafío no radica en la cantidad de empleos, sino en su calidad y en los cambios profundos que se producen en su naturaleza. Nos preocupa especialmente el fenómeno de la polarización salarial. Esto ocurre cuando disminuye el porcentaje de trabajadores en ocupaciones de ingresos medios frente a un aumento en las de ingresos altos y bajos. La nueva economía tiende a favorecer a quienes cuentan con una formación avanzada, desplaza a los trabajadores intermedios hacia empleos menos remunerados y disminuye drásticamente las oportunidades para quienes tienen menor formación.
Si nos fijamos, por ejemplo, en las diferencias entre el talento sénior y júnior, ¿cómo se pueden construir puentes efectivos entre estas generaciones, aprovechando la experiencia del talento sénior y la capacidad de adaptación e innovación del talento júnior? ¿Considera que prácticas tan populares como el teletrabajo pueden representar un obstáculo para fomentar esta interacción necesaria para la innovación?
Construir puentes efectivos entre el talento sénior y júnior es sin duda uno de los caminos más interesantes para que en un entorno laboral broten proyectos innovadores. Esto implica una estrategia por parte del centro de trabajo para combinar la frescura y las habilidades digitales de los jóvenes con el valor intangible de la experiencia que atesoran los empleados con un mayor recorrido. Para ello, es interesante crear un mapa de capacidades que ayude a crear equipos diversos. Es fundamental crear espacios de trabajo inclusivos que valoren la diversidad y fomenten la colaboración. La formación continua para ambos grupos ayuda a equilibrar las competencias técnicas y el conocimiento institucional, permitiendo que las generaciones converjan en proyectos comunes.
En cuanto al teletrabajo, vemos cada vez más claro que las oficinas ya no son el sitio donde los trabajadores meramente se juntan a desempeñar cada uno su actividad. Es un espacio cada vez más social, un lugar de relación entre empleados que fomenta la inspiración y la creación en equipo. El teletrabajo representa una oportunidad en ámbitos como la productividad o la conciliación, pero en exceso podría limitar estas interacciones informales, que son esenciales para la innovación espontánea.
Cultivar un clima de innovación dentro de las empresas es un desafío constante. ¿Qué prácticas o estrategias considera esenciales para fomentar la creatividad y la innovación en el entorno laboral? ¿Cómo contribuyen las políticas de diversidad y la formación continua a impulsar este proceso?
Es importante que la empresa ofrezca a los empleados tiempos y espacios para el desarrollo profesional, porque en ese desarrollo van a poder crear cosas que les pueden beneficiar como trabajadores, pero que también va a repercutir positivamente en la empresa. Las políticas de diversidad son fundamentales en este proceso, ya que aportan una riqueza de perspectivas y experiencias que aumentan la capacidad de resolución de problemas complejos. Las perspectivas de los demás abren puertas sobre las propias que muchas veces uno mismo no había pensado. La inclusión de equipos diversos, en términos de género, edad, formación y cultura, no solo mejora la creatividad, sino que también facilita la adaptación a un entorno empresarial cambiante. La formación continua es otro pilar clave para impulsar la innovación.
Al proporcionar a los empleados acceso a herramientas y conocimientos actualizados, las empresas aseguran que sus equipos puedan anticiparse a las tendencias y adoptar tecnologías emergentes.